Las medidas impulsadas esta legislatura en la Reserva Marina de Levante duplican la población de pescados vulnerables. Algunas áreas de la Reserva han multiplicado por ocho el número de ejemplares en una década. El conseller de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca, Vicenç Vidal, y el director general de Pesca y Medio Marino, Joan Mercant, han anunciado, este jueves, los resultados del estudio de seguimiento de las poblaciones de pescados vulnerables de sustrato rocoso a la Reserva Marina de Levante entre 2008 y 2018.

Hay que recordar que la Reserva Marina de Levante, creada en el 2007, dispone de un área de reserva integral, una reserva parcial en aguas interiores (controlada por el Gobierno autonómico) y una reserva parcial en aguas exteriores (controlada por el Gobierno del Estado). En diciembre de 2016, un decreto introdujo, a propuesta de los pescadores profesionales, una serie de cambios en esta Reserva Marina encaminados, sobre todo, a reducir el esfuerzo en la zona de reserva parcial autonómica y que unificaba criterios y normativas con la reserva parcial estatal.

Los resultados del recuento, los primeros desde el Decreto, constatan el acierto de haber endurecido las condiciones para la pesca en la reserva parcial autonómica. Y es que, en sólo dos años, casi se ha duplicado (x 1,8) la población de especies vulnerables en esta área. Hay que recordar, de hecho, que la necesidad de aprobar el Decreto se empezó a plantear cuando, el mismo 2016, se recuperó el seguimiento de especies, interrumpido durante la anterior legislatura, y se constató que los resultados de la reserva marina autonómica no eran demasiado diferentes respecto de las zonas de control abiertas a la pesca.

Con respecto a la reserva integral y la reserva parcial estatal, los resultados son similares a los de 2016, aunque se observaron diferencias entre lugares dentro de cada nivel de protección. Con todo, hay que subrayar que en la reserva integral se registra una cantidad de peces que multiplica entre 4 y 8 veces los resultados obtenidos en el 2008.

Durante la investigación, se han observado cambios incipientes en la composición de la comunidad de peces, con un incremento moderado en la contribución de especies sedentarias y buenas indicadoras del efecto de la protección, como son el mero (Epinephelus marginatus) y el corballo (Sciaena umbra), especies muy vulnerables a la pesca submarina. Los espáridos, mayoritariamente representados por la variada Diplodus vulgaris y el sargo (Diplodus sargus), siguen suponiendo la mayor parte de la biomasa a los tres niveles de protección considerados dentro de la Reserva de Levante.

El estudio destaca, además, el efecto del incremento en el esfuerzo de vigilancia sobre la recuperación de las poblaciones de pescados, ya que entre 2011 y 2016 no hubo personal fijo dependiente del Gobierno destinado a la vigilancia de la Reserva Marina de Levante. El Faralló de Cala Gat (reserva parcial estatal) es el punto con mayor diversidad, densidad y biomasa (23,5 kg/250 m2) en toda la Reserva Marina de Levante. Además, representa la zona con el valor más alto de biomasa de todas las reservas marinas baleares, con la limitación de que esta gran concentración de pescados se produce a un área muy pequeña.

El caso del Faralló d’Albarca (reserva parcial autonómica) resulta interesante, dado que la biomasa observada en el 2018 es una de las más altas de entre las reservas estudiadas en las Islas Baleares, incluso supera un buen número de zonas de reserva integral. El incremento de biomasa observado en el 2018 hacia el 2016 (x 3,5) y la contribución de las tres especies de meros (Epinephelus marginatus, Epinephelus costae y Mycteroperca rubra) a este incremento hacen más evidente la prohibición de la pesca submarina como a causa de los cambios explicados.

Nuevo decreto de localización y seguimiento de embarcaciones pesqueras. Vidal ha adelantado, también, el contenido del Decreto para regular el Sistema de Localización y Seguimiento de Embarcaciones Pesqueras en las Islas Baleares (SLSEPIB) que el Consejo de Gobierno aprobará, con toda probabilidad, este mismo viernes. Se trata de un sistema electrónico de seguimiento de embarcaciones que gestionará la Dirección General de Pesca y Medio Marino con el cual se hará seguimiento de las actividades de la flota pesquera profesional balear. La incorporación del SLSEPIB al sistema de los barcos pesqueros con puerto base en las Islas Baleares se hará de manera progresiva e irá a cargo de la Dirección General de Pesca y Medio Marino. Consistirá en un dispositivo de localización, denominado caja verde, que se instalará a bordo de cada barco.

Este sistema electrónico de localización responde a la necesidad de cumplir las normas de la Política Pesquera Común a través del Reglamento (CE) 1224/2019, el objetivo general del cual es garantizar una explotación racional de los recursos pesqueros, siempre con unas condiciones socioeconómicas y medioambientales sostenibles. Los sistemas electrónicos de localización de barcos se han mostrado como una herramienta realmente eficaz en las tareas de evaluación del esfuerzo pesquero, la valoración indirecta de la rentabilidad de las áreas de pesca y el seguimiento de las actividades en zonas protegidas.

Ayudan a simplificar las tareas de cumplimiento obligatorio con respecto a reportar la información de los resultados de las actividades pesqueras en las reservas marinas y sirven como herramienta de aviso y localización en los protocolos de salvamento y emergencias en el mar, y de esta manera contribuyen a mejorar los niveles de seguridad de la flota pesquera.

En definitiva, el establecimiento de este sistema electrónico de localización de barcos pesqueros, junto con la aplicación telefónica “Diario de pesca” de los pescadores recreativos, contribuirá a la consecución de los objetivos marcados sin cargas administrativas innecesarias. Balance de ayudas al sector. Finalmente, Mercant ha hecho balance de las ayudas otorgadas en el sector esta legislatura.

Así, las cofradías de pescadores ya han recibido 885.000 euros, una cifra en la cual habrá que sumar las ayudas para este año (365.000 €), cuya convocatoria se publicó en el BOIB el sábado pasado. El director general ha destacado que estas ayudas han aumentado 10.000 € cada año desde 2016. A esta cantidad hay que sumar 80.000 € adicionales en la convocatoria de 2018. Además, las asociaciones o federaciones de cofradías de pescadores han recibido 98.000 € anuales desde el inicio de la legislatura; en total, 1.642.000 € una vez finalice este año.