Editorial: Anuncia Alemania el cierre del país y confinará a su población. Lo mismo que está pasando en Francia, Italia, Portugal y diferentes naciones de Europa. Sin embargo hay una gran diferencia muy importante con respecto a España. Aquí se cierra todo y búsquese usted la vida, millones de anuncios de intenciones y propaganda y nada llega a los bolsillos de las personas. En Alemania por ejemplo se cierra y el Gobierno pagará el 75% de toda la facturación del mismo mes del año pasado. Así uno puede quedarse en casa todo el día y hacer caso a las autoridades. De esos dirigentes te puedes fiar.

En el país de Pepe Gotera y Otilio y los Reinos de Taifas te cierran a las 22:00 horas por cierre perimetral toda la hostelería, bares, restaurantes, ocio, teatros, conciertos y no se anuncian medidas complementarias de ayudas económicas. Te cierran el establecimiento como pasa en los parques de ocio infantil y salas de cumpleaños, desde hace 8 meses, y nunca más se supo. Arruinan un sector y se quedan tan tranquilos. Ni tiene tiempo la autoridad de la cogobernanza para atender el drama y ruina completa de las familias.

Paralelamente a estas realidades se anuncian unos presupuestos los más altos de la historia, con 27.000 millones más procedentes de Europa. El fondo y la forma da igual, quienes los van apoyar piensan más en acercar presos y nuevas patrias. Eso si de lo mio que hay y se hace un apartado especial para las denominadas autonomías históricas. Cuentan los pocos economistas que no están en nómina del poder establecido y que pueden opinar en algún medio, que la subida de impuestos y la presión fiscal afectará a la pequeña y mediana empresa, autónomos, trabajadores. Lo contrario a lo que dicen. Como pagarán impuestos después del nuevo confinamiento, nos embargarán a todos.

La maquinaria de Hacienda está muy engrasada, nada funciona en este país de la cogobernanza desde hace ocho meses. Sin embargo desde el fisco del Gobierno se siguen facturando los mismos recibos, se cobran impuestos y tasas hasta el último céntimo. Nada se aplaza. Se incrementan los recargos y se embargan cuentas y propiedades. En Alemania te dan aire para que cuando salgamos de esta pesadilla todo comience a funcionar como se dejó antes de llegar la vacuna y los tratamientos. Aquí en el país de Pepe Gotera y Otilio y los Reinos de Taifas solo quedará, monte seco, culebras, desierto y las colas del hambre.

Quieres buscarle la parte positiva a toda esta ruina y caos. Es imposible, recibes cada día realidades que te narran, cuentan detallan, explican, desde todos los ángulos de la vida, profesiones, trabajos, colores, condición. Insoportable. El corralito de Argentina es una broma al lado de lo que está pasando aquí. El trueque y el intercambio ha venido para quedarse. Mientras en Manacor todos aquellos que tienen segunda residencia en Porto Cristo y S'Illot y no tienen obligaciones familiares y laborales en la capital del Llevant se han ido 15 días al litoral y olvidarse dos semanas de tanto descontrol. Ayer la recta de Santa Cirga desvelaba un aumento de tráfico rodado inusual para un miércoles de octubre.

No culpen ustedes a sus concejales de tamaña fechoría. Que puede hacer un alcalde y sus regidores si le viene el Govern con el BOIB por delante y le obligan a tomar medidas. Las cuales no van apoyadas con ayudas económicas. Solo propaganda y publicidad. El Gobierno central y el Govern son quienes ostentan el poder absoluto. La administración más cercana son las Corporaciones locales y se acude al Ayuntamiento para explicar la desolación. A las entidades locales no llega nada, todo lo contrario, tenemos que pagar servicios que no son nuestros del bolsillo del ciudadano y eso que hemos mandado desde Baleares 450 millones de euros para el equilibrio de solidaridad del eje Sánchez/Iglesias. Rafael Gabaldón San Miguel.